¡OPINIÓN! LETRAS DE JUAN GABRIEL

• El IEEM facilita la entrega de títulos patito a “Doctores Honoris Causa”.

• Los infiltrados en el movimiento de la UAEMex que casi toman rectoría.

• Operativo Liberación deja al descubierto relaciones y vínculos políticos.

• PRI y Alito Moreno, los “manitas de estómago”, todo lo hacen polvo.

POR JUAN GABRIEL GONZÁLEZ CRUZ

En un país donde el mérito académico aún representa una vía de movilidad social y prestigio público, resulta alarmante que organismos como el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) se presten a avalar, directa o simbólicamente, una farsa.

La semana pasada se publicó y difundió una investigación de Reporte Índigo, del periodista Daniel Flores Padilla, donde –entre otros datos- se expuso que el IEEM habría facilitado —incluso con el uso de sus instalaciones— la entrega de títulos de Doctor Honoris Causa a personajes de la vida política estatal a través de organizaciones sin reconocimiento oficial, esto a cambio de pagos que rondan los 35 mil pesos.

No hablamos de universidades con validez oficial, sino de “claustros” o “institutos” privados como el Instituto Mexicano de Líderes de Excelencia (IMELE) o la Organización Mundial de Líderes (OMLID), que operan como verdaderas maquiladoras de títulos patito. Lo escandaloso es que personajes públicos y con trayectorias políticas amplias han sido parte de esta farsa.

Ahí está el caso de Mario Alberto Cervantes Palomino, ex presidente del desaparecido partido Nueva Alianza en el Estado de México, quien no solo recibió este título honorífico, sino que después fue parte del grupo que los entregaba en nombre del IMELE, en actos tan llamativos como el que se llevó a cabo en la Facultad de Derecho de la UNAM, donde invistió a la cantante Tatiana.

Incluso Emilio Ulloa, político veterano de izquierda y varias veces legislador del PRD, fue anunciado como acreedor de un título similar por parte del IMELE en mayo de 2025.

Esta organización, según Reporte Índigo, también solicita “aportaciones” por montos considerables a cambio de estas distinciones. En junio de 2025, una ceremonia de OMLID tuvo lugar ni más ni menos que en un salón del IEEM en Toluca.

Pero lo más escandaloso es la contradicción en la que cayó el IEEM, con Amalia Pulido de consejera presidenta, pues en 2024 se ordenó cancelar de forma fulminante un Doctorado en Derecho Electoral que iba a impartirse desde el propio Centro de Formación del Instituto y que sí contaba con autorización de la SEP. Es decir, cerró la puerta al conocimiento formal y validado… pero abrió las puertas del IEEM para que entidades sin reconocimiento alguno entreguen doctorados de papel.

¿Quién autorizó el uso de las instalaciones del IEEM? ¿Se pagó renta institucional o fue un “favor”? ¿Es legal que un organismo electoral se preste a ceremonias privadas en las que hay lucro de por medio?

El silencio institucional es una forma de complicidad. Y mientras no haya una postura clara ni rendición de cuentas, el IEEM estará enviando un mensaje devastador: que su papel como autoridad moral y legal no solo está en duda, sino que puede ser alquilado —igual que su auditorio— por unos cuantos miles de pesos.

CANCIÓN, DICHO O REFRÁN

El salpicón sureño…

El Operativo Liberación, destinado a cortar los lazos administrativos y financieros que mediante la extorsión y el acaparamiento de productos y servicios trabajaban para el crimen organizado de la zona sur del Estado de México, nos sigue revelando que hay muchos salpicados en el ejercicio público y político de aquella región. No sólo en Ixtapan de la Sal donde la Tercera Regidora, Yareli “N” fue parte de los ocho detenidos, sino también en Valle de Bravo donde otro de los detenidos, Eli “N”, el empresario que tenía acaparado el mercado de la construcción, resultó ser el papá del Segundo Regidor de Morena, Diego Jiménez Jasso. Pero esto no termina aquí, ya que se sabe que otro de los detenidos y vinculados a proceso, Gonzalo “N”, es hermano de Víctor Benítez Jaramillo, presidente del PRD en Valle de Bravo, aunque recientemente el capturado se dejó ver en el cumpleaños del diputado local de Morena por ese distrito, Javier Cruz Jaramillo. Muchos lazos, vínculos y posiblemente intereses.

¿De parte de quién?...

Si ya hay rectora emergida del voto universitario, académico y administrativo; si lograron detener la imposición de quien era señalada como la candidata oficial; si la mayoría de las unidades académicas ya están listas para regresar a clases presenciales; si la rectora Patricia Zarza Delgado –con todo y la complejidad que amerita la coyuntura actual- ha dado visos de querer solucionar la crisis con diálogo y apertura… ¿por qué y de parte de quién se suscitaron los disturbios del pasado martes en la noche, donde varios “supuestos estudiantes” se quisieron hacer pasar como integrantes del agrupamiento Colmena Revolucionaria y pretendieron desalojar a los paristas de la Casa del Estudiante de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex? Se sabe que algunos de los que irrumpieron son egresados o tienen relación con la Unidad Académica Profesional de Chimalhuacán y con la Universidad Autónoma de Chapingo, otros de plano son infiltrados y no tienen nada qué ver con la UAEMex ni con el Enjambre Estudiantil Unificado (EEU). Según investigaciones de la propia universidad y de las áreas de seguridad estatal, detrás de esta intentona de tomar por asalto y sustraer documentos de la Máxima Casa de Estudios hay identificados personajes ligados a dos ex rectores, un ex gobernador y hasta operadores de una de las recientes aspirantes a rectoría. Por cierto, la policía municipal de Toluca –que llegó cuatro horas después de la solicitud de apoyo- no puso a disposición del Ministerio Público a los cuatro sujetos que el Enjambre Estudiantil le entregó la madrugada de este miércoles.

Manitas de estómago…

Cuando un partido como el PRI y su dirigente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, tocan, ondean o asumen una problemática real en aras de defender a la ciudadanía o señalar actos indebidos o delictivos, lo único que hacen es lavarle la cara a quienes pretenden crucificar. Hace unas horas Alito Moreno presentó denuncias penales ante la Fiscalía General de la República (FGR) en contra del ex presidente Andrés Manuel López Obrador; de su hijo Andrés Manuel López Beltrán; del senador Adán Augusto López Hernández, del Secretario de Educación del país Mario Delgado Carrillo, así como de los gobernadores morenistas de Sinaloa Rubén Rocha Moya, de Tamaulipas Américo Villarreal, de Campeche Layda Sansores San Román, de Sonora Alfonso Durazo Montaño y del ex jefe de la policía de Tabasco Hernán Bermúdez Requena, a quienes acusa de delincuencia organizada. Alito lo sabe, no tiene ni calidad moral ni política para hacer señalamientos de corrupción, pues en sí también el líder priista tiene denuncias en ese sentido y aunque de fondo hubiese elementos para indagar a uno o varios morenistas, más bien parece que Moreno Cárdenas se está curando en salud por lo que se le avecina: su posible desafuero y puesta a disposición de la justicia porque su pasado inmediato está igual o peor que aquellos a los que pretende juzgar. Alejandro Moreno ya raya en un cinismo ridículo; el PRI o lo que queda de este partido han perdido la categoría de oposición que México necesita y todo lo que tocan lo hacen polvo.